Hace calor, mi vestido es verde, verde agua, es bastante pequeño por eso uso un short debajo, no es muy largo porque la idea no es cubrir mis piernas, pero es lo suficientemente largo para soportar el roce de mis muslos. Cuando tenía 13 años un día se me ocurrió usar una minifalda, era tan pequeñita tan pequeñita que mis muslos rozaban y con el calor terminé con un sarpullido, horrible tener algo así en una zona tan delicada. Luego sin tener quien ponga una crema en una zona tan privada como esa, tuve que hacerlo yo misma, el problema es que mientras lo hacía un poco de crema ensució mi ropa interior, y tratando de limpiarla toqué de manera casual mi clítoris. Era una sensación que ya conocía, pero no sé por qué hay momentos en los que uno siente más las cosas. De alguna manera sentí que debía dedicarme al sarpullido y no a la ropa interior, pero mi ropa se volvió a ensuciar, volví a pasar por ahí los dedos pero esta vez ya no era una cosa casual. Metí mi mano debajo de la tela y un dedo en esa ranura que ni siquiera sabía completamente cómo funcionaba. No sólo estaba caliente, estaba húmedo y suave y al contacto con mis dedos todo mi cuerpo podía sentir un cosquilleo delicioso. Empecé suave, porque suave era rico, la humedad era sabrosa así que la pasé por toda la zona, bien abajo por donde alguna vez habría un agujero (agujero que todavía no conocía) y bien arriba justo sobre el clítoris. Jugaba con el clítoris y luego subía y bajaba una y otra vez. Lo que primero era un cosquilleo, ahora era una cosa que inundaba todo mi cuerpo, y mi dedo solo ya no podía con toda la emoción. Apoyé toda la mano en mi pubis y empecé a presionar mientras frotaba arriba y abajo. Mi respiración se hizo rápida, mi corazón latía a mil y esa cosa dentro de mí iba creciendo y haciéndose más grande que mi cuerpo. Sin darme cuenta empecé a gemir a ritmo continuo, trataba de no hacer ruido pero era algo que no podía evitar, la cosa subía y subía, la presión interior se hacía insoportable mientras mi mano subía y bajaba con más fuerza, con más rapidez. De repente sentí como si toda la presión se liberara, en espasmos explotó algo dentro de mí, fue como un buum, y un placer increíble salió a borbotones.
No puedo decir que fue mi primer orgasmo, esas cosas no las puedes medir tan fácilmente, pero creo que fue la primera vez que lo hice sabiendo perfectamente lo que hacía. Antes de eso, era sólo una niña jugando con su cuerpo, para ese entonces ya había un chico que me gustaba y que no se atrevía ni a tocarme el cuello cuando nos besábamos.
Bueno, hace calor, mi vestido es verde agua y uso un short debajo. Es un vestido recto, por eso me pongo una casaca deportiva encima, porque así se ve más casual. Uso unas sandalias bajas, con bastantes tiritas, me encantan mis pies, así que aunque no pinto mis uñas los cuido bastante. La verdad estoy bastante orgullosa de ellos, son delgados y largos, bastante armónicos y flexibles además cuido que estén siempre suaves.
Hoy no voy a ver a nadie, no tengo nada pensado realmente, sólo voy a pasear, tomarme un trago en algún bar a ver si encuentro algo interesante.
Hola: si quieres compartir algo conmigo, fotos, dibujos, historias, etc, escríbeme a lulunaluna@gmail.com. También me dices si quieres que lo publique y bajo qué seudónimo (me reservo el derecho de edición)
Hola: si quieres compartir algo conmigo, fotos, dibujos, historias, etc, escríbeme a lulunaluna@gmail.com. También me dices si quieres que lo publique y bajo qué seudónimo (me reservo el derecho de edición)
0 comentarios:
Publicar un comentario
todos los mensajes son revisados antes de ser admitidos